ER TITO

ER TITO, SU GENTE Y SUS PASIONES HUELVA Y LA SEMANA SANTA

lunes, 24 de enero de 2011

FELICIDADES HERMANO IVÁN ANGULO



Como no podía ser de otra manera hermano. aquí esta mi felicitación por tu nueva paternidad, ya ha nacido Marta Angulo, Que la llegada de esta nueva vida ilumine vuestros corazones, os llene de la SALUD y satisfacción suficientes para ser felices hasta la eternidad. Un fuerte abrazo para vosotros y tierno besito para el bebé.

ENHORABUENA

Marta, nombre femenino de origen hebreo cuyo significado es ”señora”
Festividad santtoral: 29 de Julio



UN POQUITO DE HISTORIA

ORÍGENES DE LA SEMANA SANTA DE HUELVA
los orígenes de la Semana Mayor onubense estarían en el siglo XV o XVI, algo tardíos en comparación con otras ciudades de nuestro entorno. Al parecer, la primera manifestación pública celebrada en tiempos pasionistas consistió en un Vía Crucis que se dirigió hasta la extinta Ermita de la Santa Cruz, sita en el cabezo de la Joya, para venerar un fragmento del Lignum Crucis allí depositado. En lo que aún no se ponen de acuerdo los escasos historiadores onubenses es en el lugar de salida de dicha procesión. Mientras unos apuntan el templo de San Francisco (cuya orden da especial culto a la Pasión de Cristo y a sus Llagas), otros autores proponen como punto de partida la Parroquia Mayor de San Pedro. Teniendo en cuenta que el cenobio franciscano no se crea hasta el año 1587, creo que esta última opción es la más probable.

En 1573 llegan noticias de las primeras Cofradías. Por entonces ya existía la Hermandad de la Santa Cruz y Sangre de Nuestro Señor Jesucristo. La misma hacía su Estación de Penitencia en la tarde del Jueves Santo con un crucificado y un cortejo en el que, suponemos que por el nombre de la corporación, habría disciplinantes. De la propia imagen del Cristo no sabemos nada, aunque, a modo de hipótesis, considero interesante estudiar la posible relación de esta talla con el Cristo del Santo Sepulcro en su Vera Cruz, titular del Santo Entierro y venerado en la misma iglesia, la Ermita de la Soledad. La corporación de la Sangre desapareció con el devenir de los siglos, aunque se apunta por parte de algunos expertos su posible fusión con la Hermandad de la Vera Cruz, de la que hablare más tarde.

Del mismo año tenemos noticias de otra Cofradía que pudo resistir mejor el envite del tiempo, aunque con marcadas épocas de crisis (la última dura desde la Guerra Civil). Hablamos de la Hermandad del Santo Entierro y la Virgen de la Soledad, de la que hablaremos en su momento.
Actual imagen de Cristo Yacente. La cabeza es la del anterior Cristo, acoplada a un cuerpo de León Ortega
Existe polémica en torno de la Cofradía de la Vera Cruz, citada en un testamento de 1583, aunque considerada bastante anterior, incluso más antigua que la Parroquia de la Concepción donde residía ya a finales del XVI. El historiador local Arroyo de los Reyes sugiere que la capilla actual de la Hermandad podría haber sido en tiempos una ermita, agregada después a la nave lateral del templo concepcionista. Esto explicaría donde estaba la Hermandad hasta la construcción de la Parroquia. En el apartado dedicado a la Hermandad de la Oración en el Huerto, ampliaremos información sobre esta Cofradía.
Los Padres Mínimos del Convento de la Victoria son pieza clave en la fundación de dos Hermandades a finales del siglo XVI. Hablamos del Dulce Nombre y del Nazareno. De la segunda hablaremos cuando nuestro recorrido cofrade llegué a la Madrugada del Viernes Santo, pero del Dulce Nombre, como del resto de Cofradías extinguidas, hablaremos en este post. Como la mayoría de las corporaciones bajo esta advocación, el Dulce Nombre de Huelva veneraba a una efigie de Niño Jesús pasionista, en este caso una imagen del Divino Infante con la Cruz a cuestas. Salía en la tarde del Jueves Santo, acompañado por una dolorosa cuya advocación era María Santísima del Mayor Dolor. La desaparición de la Cofradía se sitúa a principios del XVIII, recién llegada al Convento de las Madres Agustinas
OTRAS COFRADÍAS EXTINGUIDAS DE HUELVA

Hasta 1653 no tenemos noticia de la existencia de una nueva Cofradía. Hablamos de la Hermandad del Santísimo Sacramento, Animas Benditas y Cristo de Jerusalén, establecida en la desaparecida Ermita de San Roque, copatrón de la ciudad. Este templo se encontraba en la Vega Larga, cerca de lo que hoy es la Catedral. A este templo sería trasladada la imagen del crucificado al extinguirse la corporación, que hoy es venerada por la Hermandad de los Judíos. En 1771 nos llegan noticias de una nueva Cofradía en el Convento de la Victoria. Hablamos de una corporación dedicada al culto del Santo Cristo de los Azotes. Salía en procesión la tarde del Jueves Santo y desapareció un siglo después, con la exclaustración del cenobio mínimo.

También en el siglo XVIII tenemos noticia de una hasta ahora poco conocida Hermandad de Jesús Nazareno en la Parroquia Mayor de San Pedro. Lo único que se sabe (mejor dicho, se intuye) de dicha corporación nazarena es que procesionaba a un Cristo con la Cruz a hombros, imagen que bien pudiera ser la primitiva titular de Pasión.

Pasando a la centuria decimonónica, nos llega la cita de una Hermandad dedicada a Nuestro Padre Jesús de Saltés, imagen muy devocional entre los marineros onubenses de aquel siglo. Procesionaría la tarde del Jueves Santo desde una ermita propia situada en la calle del Puerto. Poco más sabemos de dicho desfile procesional.

En 1896 se instituye en la Mayor de San Pedro una Hermandad dedicada al culto de Nuestra Señora de los Dolores. La misma era una bella talla del escultor cántabro Francisco de la Gándara que fue destruida en la Guerra Civil y representaba el misterio de la Piedad. No obstante, antes de este triste suceso fue procesionada varios años por la Hermandad del Santo Entierro con la advocación de Virgen de las Angustias